Esta era una vez un tendero llamado Rafael que como era el único que tenia tienda en el pueblo en donde vivía, todo lo vendía caro con precios súperexagerados. Los habitantes del pueblo le pedían encarecidamente que por favor los considerara y les vendiera con precio justo, el señorRafael les respondía diciendo, yo no necesito de nadie,a mí nadie me ayuda ni me colabora, todo lo que tengo lo he comprado con mi plata. Toda las personas del pueblo de ver tanta injusticia un día más que otro se reunieron e hicieron una recolecta para ir a comprar a la ciudadartículos con el fin de montar una tienda mejory con mas productos que la de Rafael, desde ese momento repentinamente se le congelaron las ventas a Rafael de tal modo que todos los artículos se empezaron a dañar, fue en ese entonces que se empezó a dar cuenta de que todos necesitamos de todos sin importar las cualidades que tengamos.
El señor Rafael después que se diocuenta que no vendía nada ni con los precios justosterminó regalando todos los artículos, el señor Rafael se dio cuenta que considerando las personas podría progresar él y los demás.
Dónde estás Señora Paz? En mi afanada búsqueda recorrí durante décadas el continente europeo; la misteriosa y milenaria India del continente asiático fue mi refugio durante años de cacería; en Norte y Centroamérica me sumergí buscándote, pero fue en vano. Cansado, agobiado, desconsolado y resignado regresé a mi región, pueblo natal en Suramérica. Con especial concentración pregunté en mi interior, pero con dirección hacía Dios: “¿Dónde me has escondido la Paz?” y de mi interior sentí fluir una respuesta; no sé si la inventé o me fue revelada, pero así escuché: “Resígnate hombre y deja de viajar, no me busques más; aquí me puedes hallar” Un haz de entendimiento iluminó mi pensamiento. ¿Por qué nunca la podía ver, ni oír, ni sentir; Cuando siempre ha estado tan cerca de mí? En mi loca y afanada búsqueda neciamente esperaba que otros me dieran lo que yo me negaba a dar. Ahora la pregunta una vez más ¿Dónde estás Señora Paz? Esta en todos, cada persona la puede encontrar; decidámonos a brindarla en cada uno de nuestros actos diarios y lugar, sobre todo en el hogar. Tal vez así, algún día unidos, la hagamos una sola, y muy grande, y con luz propia pueda ella brillar. Neciamente la pregunta, ¿Dónde estás Señora Paz?
Hace muchos años se escuchó la desaparición de un grupo de amigos que se fueron de cacería a las afueras de la ciudad “Slee” y que nunca más regresaron.Manuel Kasi, kami y Jacinto, se fueron un día al bosque a cazar; ya en el bosque, cada uno tomó caminos diferentes; Kami el más jovencito, se fue al centro del bosque; Kasi, se fue por los lados del río; Manuel escogió las montañas y Jacinto, el más miedoso que cazaba por primera vez, decidió quedarse a cuidar la comida.
Después de unas horas Jacinto se desesperó de estar solo y no encontraba que hacer, así que inició a maniobrar la escopeta y cuando menos pensó, se le disparó; OH… dijo Jacinto, que fuerte suena.
Sin saber que la bala llegó justamente al río donde estaba Kasi, la bala le pegó en el pecho; Kasi rodó por el correntoso río; pedía ayuda pero nadie le escuchó, mientras los latidos de su corazón se iban apagando poco a poco; Kasi murió y Jacinto ignoraba lo sucedido, mientras seguía jugueteando con su escopeta; pasaban junto a él unos pavos que se dirigieron hacia las montañas; Jacinto se dijo: ¡que pavos tan bonitos! Esta será la cena para el cumpleaños de Kasi esta noche; entonces Jacinto tomó su escopeta y se fue a cazar a los pavos; estando junto a ellos empezó a disparar pero se fueron, y cuando ya se venía, ve a un pavo en la copa de un árbol, así que se acomodó para no fallar porque solo le quedaban dos cartuchos.
Apuntó hacia el pavo y se dijo “No te escaparás”… Bum, bum… y el pavo cayó y con él su amigo Manuel que descansaba después de haber matado a un terrible venado; Manuel no tuvo ni tiempo de pedir ayuda, su muerte fue instantánea, ya Jacinto había matado a dos de sus amigos inocentemente.
Jacinto celebraba la muerte del pavo y se preguntaba ¿por qué no llegan mis amigos?, mientras almorzaba; en los arrabales del bosque Kami perseguía a un feroz león, pero con tan mala suerte que los cartuchos se le habían acabado cuando tenía al león al frente y este león al ver a su cazador le fue encima devorándose al pobre chico.
Jacinto sin saber que había quedado solo en el bosque, llamaba a sus amigos; Manuel, Kasi, kami…donde están amigos?...,porque no escuchan?.kami… kasi… Manuel…
Ya se hacia de noche y Jacinto estaba en el bosque dando vueltas, cuando busco salir no encontró la salida.
¡Oh Dios, me he perdido; se dijo Jacinto, mientras llegaba a un hermoso río, sentándose en la orilla bebía agua, pero de pronto el agua que bebía se iba volviendo sangre, OH Dios, que esta pasando dando un brinco, esto que es? Asomándose al río,ve bajar sangre por todo su recorrido, de pronto escucha que alguien pide ayuda; ¡auxilio!, ¡ayúdenme!.
¿Quién anda allí?; pregunto Jacinto; todo se había quedado en silencio; OH dijo Jacinto: ¿estoy alucinando? ..ya eran las ocho de la noche y Jacinto seguía en el bosque entre la nada sentadoen unos árboles, esperando quien sabe que, de pronto se vino un fuerte aguacero con relámpagos, sin tener adonde ir, Jacinto se acomodo lomas que pudo entre los árboles pero no se escapo de la rabiosa lluvia.
Y a la media noche, Jacinto se había quedado dormido, sin saber que junto a él estaba una víbora, que se le enrollo entre laspiernas, picándole en la piernaderecha, Jacinto no se dio cuenta, porque soñaba que habían llegado a la casa y el preparaba el pavo para la fiesta de cumpleaños de Kasi, Manuel asaba el venado para repartirlo entre el pueblo, Kami contaba que el león se le había escapado, pero en segundos Jacinto estaba solo; amigos donde están?, no me dejen otra vez, tengo miedo, mucho miedo.
Al despertar un dolor inmenso le entumía su cuerpo, no puedo moverme, decía Jacintome duele,me duele; con desespero gritaba. Mamá, ¡tengo mucho frío!, Que tengo?, que me esta atravesando el corazóndecía Jacinto,. Pero, poco a poco su corazón dejaba de latir;
Manuel, que se hicieron?, ayúdenme, decíaentre los lamentos llorando.
Jacinto murió lentamente en el bosque solo, sin saber que había matado a dos de sus amigos y desde ese día en el bosque se escuchan disparos, lamentos, gritos pidiendo auxilio.
Nadie se ha atrevido a entrar allí, por eso lo llaman:EL BOSQUE DEL LAMENTO
Hay quienes dicen que algunas almas no saben que han muerto
Érase un vez un niño llamado Panchito, quien tenía 10 años; Panchito era un niño lleno de alegría y muy inteligente y poseía muchos valores.
Este niño tenía cinco (5) hermanas quienes ya eran mayores de edad, él era el único hombre y el menor de su casa. Él era muy consentido y todos le tenían mucho cariño. ¿Hasta ahora todo parece perfecto? Pero no era así;él tenia un gran problema ¡Panchito no tenia con quien jugar!
Todos los días Panchito se levantaba muy temprano para ir a la escuela luego llegaba a su casay se sentaba a ver televisión; después se ponía a dibujar, al cabo de tres horas Panchito se aburría de ver tele y dibujar, entonces pensaba en jugarpero no le gustaba jugar solo,le pedía a sus hermanas que por favor jugaran con él, pero las hermanas estaban muy ocupadas para ponerse a jugar con él.Luego le pedía a su padre que jugara con élpero sucedía lo mismo que con sus hermanas.
Panchito al escuchar estas respuestas se siente muy tristey no sabe que hacer para poder divertirse;se pone a pensar y se hace muchas preguntas una de esas es ¿Por qué no tiene a alguien con quien jugar?
Al pasar el tiempo Panchito ya llega a la adolescencia y empieza a tener intereses como la música y otras cosas; el juego, lo va olvidando.
YaPanchitopuede afirmar que no sufre por que no tiene alguien con quien jugar, ya no lo vez triste menos se formula aquellas preguntas que lo atormentaban. Pero lo único que Panchito tendrá toda su vida muy claro es que no pudo jugar en su niñez.
Esta era una princesa llamada Rosa. Que tenía el cabello de siete colores; cuando ella salía del castillo, todos los príncipes la observaban; cuando había bailes, en algunos castillos, a ella la invitaban pero ella asistía muy poco y a los príncipes les encantaba bailar con ella. El día en que la princesa Rosa decidió bailar bailo con un príncipe llamado Vivían mientras iban bailando se miraban fijamente y ambos se sonreían y se dieron cuenta que eran tal para cual decidieron casarse y tuvieron una princesita llamada Angélica y vivieron felices por siempre.
Había una vez una joven llamada Paula, ella era una joven humilde que soñaba con ser alguien importante, pero había un problema, era analfabeta; aquella joven vivía con su abuela que la crió porque no tenía padres, ella tenía que hacer diferentes cosas para ganar dinero pero nunca hacia cosas deshonradas. Un día le sucedió a ella una tragedia; el ranchito donde Vivian las dos, se quemó y desafortunadamente su abuela murió. Un hombre rico que vivía cerca de allí, decidió acogerla en su casa, la joven le contó su sueño y la dificultad para hacerlo realidad. El hombre tenía una hija la cual no le cayó bien Paula y decidió hacer cualquier cosa para sacarla de su casa, entonces ideó un plan contra Paula, su padre tenía una joya valiosa; que podía llegar a valer millones, entonces la hija del hombre que acogió a Paula en su casa, se robó la joya entró al cuarto de Paula y se la metió en sus cosas , como era de esperarse, acusaron a Paula, pero aquel hombre que era tan bueno, le creyó a Paula y amenazó a su hija con mandarla muy lejos sino decía la verdad la muchacha se mostró arrepentida y dijo la verdad; gracias a esa verdad Paula pudo estudiar cumplir sus sueños de ser alguien importante, porque aquel hombre para limpiar el nombre de Paula, decidió regalarle todas sus pertenencia s.